Porque te hice de la nada,
de la sorpresa y el deseo,
quise adorarte despacio,
soñarte poco a poco.
Y quise ser joven.
Quise atrapar tus colores,
y una cierta forma de mirarte,
para soñar tu rostro en mi retina,
extasiado, impresionista,
la frente azul, el pelo naranja
tu mirada estrellada.
No quise verte de otra forma.