Porque te hice de la nada,
de la sorpresa y el deseo…
Tu silencio me traspasa el corazón como una ausencia en el tiempo,
como un misil, atentando, certero, sin voluntad, a la huella de mi desvelo…
Y narra mil batallas, sincero, sin palabras,
sin una frase hecha a juego con cualquier transeúnte,
sin un saludo standard, sin un like, sin apunte alguno sobre los dos,
sin una hermosa carta, sin un escueto adiós…