Te miro y no te veo,
hablo y desapareces.
Un silencio y vuelves.
Porque te hice de la nada
de la sorpresa y el deseo.
Una alteridad cercana,
que siento en los huesos,
mas no tocan mis manos.
Tiempo inconcreto
y espacio vacío.
Solo te encuentro
en lo más externo
de mi interior.