¿Quién era yo?
¿Cuándo eras tú?
Si nunca nos hemos tocado
las miradas, ni los abrazos,
solamente el orgullo inmisericorde…
…porque te hice de la nada,
de la sorpresa y el deseo
de una efímera
que baila rehuyendo la noche
a porfía de las lágrimas:
gusanos destellantes
que brincan y
disfrazan el collar
de un viaje definitivo.