Te hice una noche de luna
cuando soñaba despierta.
Y con solo cerrar los ojos
me invadían nuestros besos.
Porque te hice de la nada,
de la sorpresa y el deseo,
del mar que grita tu nombre
De sal, de roca y misterio,
pero olvidé darle vida
al corazón traicionero…
Y así como te hice un día
hoy de mi vida te alejo
Para que no duelas tanto,
para que me duelas menos.