Te concebí en mis quimeras,
de antojos que imaginaba.
Te inventé donde mis labios
besaban dichas clonadas.
Te percibí en las matutinas
perspectivas de otro universo.
Te planeé con la intención
de maravillar mis desvelos.
Y tal como te creara
en lo ficticio te sostengo,
porque te hice de la nada,
de la sorpresa y el deseo…