Te escribo y sé que escribo
para que no me leas…
No te conozco, pero te necesito:
necesito que me abraces con fuerza,
necesito estar entre tus brazos y sentir tu piel.
Cada vez que te miro, me muero por ti;
mi mundo se convierte en ti,
solo te veo a ti, solo te amo a ti,
solo quiero sentirte a ti.
Soy invisible en tu mundo, pero el mío gira al rededor del tuyo,
solo pienso en ti, en qué podemos hacer juntos,
y en lo que no haremos jamás,
pero, como dicen, de sueños también se vive…
sueños por los que dejaría todo, todo por ti.