Hola,
Solo decirte que he conseguido mirar, sonreír, suspirar.
Y ahora te escribo y sé que escribo para que no me leas, para seguir desapercibido, ingrávido.
Este anonimato otorgado por tu ausencia me ha llevado a mí.
Me ha llevado a encontrar lo mejor en lo más mínimo.
A sentir la verdad tras los hechos más insignificantes.
A descubrir la vida en los rumores distantes.
A sentir que tras este mar está todo lo demás.
A percibir esperanzas en otras miradas.
Y, aunque no dejo de pensar en ti, te escribo y sé que escribo para que no me leas, para…