Aún altero el orden de las cosas
y a despecho de la lógica
navego a contra corriente
dejando morir los días
y fingiendo que estoy cuerda. Todavía.
Es por eso que aquí sigo
junto a ti, sin que me veas
y aunque sé que te da igual
y mis palabras ignoras,
yo mantengo firme el pulso
para emborronar ideas. Aún
te escribo y sé que escribo,
para que no me leas…