Tu forma de amar se desvanece
lacerante frialdad que hiere
marasmo otoñal que ahoga
mi vida entre suspiros languidece.

Al cielo pido cambie mi suerte
pues carezco de valor
para buscar un suplente
que me reconcilie con el amor.

En las nubes ─ la ilusión
a ras del suelo ─ la verdad
sin pesadez ni levedad
«Desorbitadamente quieta
está la noche entre los dos…»
un beso tuyo renueva la pasión.