Se acerca alguien a mi vera,
siento su ente acorde a Orión.
Brillos lejanos se aceleran
en aquél cobijo entre dos.
Las mandíbulas se preparan
para dejar ver un tambor:
Desorbitadamente quieta
está la noche entre los dos.
Dientes marmolados se acercan
dejando paso abierto al son.
Lyra y Andrómeda despiertan
Casiopea y el Can Mayor.