En tu balcón haber mirado
el cielo silente, tu hilo de voz.
Por sobre el cristal de tus lentes,
está la noche entre los dos.
Haber mil y un trayectos trazado
de tanto proyecto y piquete,
noches y tinto, mi olvidado afecto,
revivido desde lo extinto,
es de tus bellas manos juguete,
Desorbitadamente quieta,
tu alma de piano y recintos:
el estanco, trastorno y verano,
no me es diferente, soy franco,
si te amo con piel, mente o instinto.