vuelvo a leer tu último correo
dijiste que ya no estabas enojada
‘tampoco necesito una respuesta’
desorbitadamente quieta
está la noche entre los dos…
mientras moldeo las palabras
que no voy a enviarte,
en duda persistente
si hago lo mejor
por respetar tu deseo
o si aún hay posibilidad
de volver a vernos
cuando te escribo
para disculparme