Solo quería decirte que las cerezas
estaban pasables
y que nadie las había comido antes.
Solo quería decirte que las nubes se habían ido
y que nadie se había enterado.
Solo quería decirte que mis palabras
las escribí en el agua
para que no las leyeran más que las olas.
Te escribo y sé que escribo,
para que no me leas…
Solo quería decirte…
que imagines los puntos suspensivos
que son los paréntesis de nuestra vida.