Si te veo… esquivo, tan lejano, evasivo,
sueño en seco.
Si te escribo,
y sé que escribo para que no me leas…,
destilo humo de brasas pobres
y mudas.
Si te poseo, ¡ay!, entonces…
Si te poseo
navego entre orillas, doblego las aguas de todos los ríos.
Te escribo y sé que escribo
para que no me leas…