Todavía el silencio,
entre las horas busco
como animal herido tus escombros
y el eco
desangelado y roto me devuelve
tan solo una réplica
de lo que fue mi nombre. 
Desorbitadamente quieta
está la noche entre los dos,
adentro, en la bahía,
las olas son un rumor cruel
que me recuerda que aún
no has dicho nada.