Hablan las formas recreadas,
hablan los cuerpos transformados.
Eres ser inédito
en busca del monstruo blanco.
Perece el cierzo en los campos
y tu mirada de buitre
quebranta mis huesos.
Me aíslas en un pueblo
entre peñascos,
me condenas al ostracismo
de la soledad.
Me haces permanente eco
y entre mis ruinas
comienzan a renacer los narcisos.
Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.