Te estoy buscando y no logro encontrarte
en la larga noche de mis quimeras rotas.
Surgiste de mis sueños
«porque te hice de la nada
de la sorpresa y el deseo».
Por eso se me escapa
qué fuerza contraria a mis anhelos
te arrancó de mi vida aún inmaduro
qué monstruo decidió llevarte lejos sin dejar que crecieras.
Ya nunca más serás
tan solo en mi memoria, de pensarte, marchita
y sé que mi canción nocturna jamás te llegará.
Devastado de sueños
cabe mi mundo entero en tu cuna vacía.