Te escribo y sé que escribo,
para que no me leas…
Estoy condenado a mirar pero no hacer
Pinto el mar, pero no salto las olas
Escribo sobre alturas, pero no me lanzo al vacío
Canto odas sobre la osadía de algunos, pero escondo la mía

Tal vez si me osara a osar
Desearía hacer y no mirar.
Tal vez si el mar estuviese en calma,
Y las alturas no fueran tan altas,
Me zambulliría en esos ojos azules
Que este poema habría echo llorar.